Los poderosos vientos que azotaron la región de Outer Banks, en Carolina del Norte, Estados Unidos, provocaron la devastación total de al menos dos casas construidas sobre la arena de la isla, arrastrándolas por completo hacia el océano. El dramático suceso fue capturado en video y rápidamente se viralizó en las redes sociales, mostrando el impactante momento en que una de las viviendas se desploma y sus restos son tragados por las olas.
El incidente ocurrió en la localidad de Rodanthe, donde la fuerza del temporal demostró ser implacable. Las imágenes del video muestran cómo la estructura de la casa, ya debilitada, se desprende de sus cimientos y es dispersada por la marea, dejando un rastro de escombros flotando en el agua.
Las autoridades locales informaron que esta no fue la única propiedad destruida por las olas en ese día fatídico. Ante la gravedad de la situación, el Servicio de Parques Nacionales de Estados Unidos emitió una advertencia urgente, pidiendo a los turistas que eviten acercarse a la zona afectada.
David Hallac, superintendente de Parques Nacionales del Este de Carolina del Norte, expresó su preocupación por el futuro de más viviendas en la zona: «Desafortunadamente, puede haber más casas que se derrumben en las playas de Seashore en el futuro cercano». Hallac también informó que, tras el primer colapso, se comunicaron proactivamente con los propietarios de viviendas a lo largo de Ocean Drive en Rodanthe, recomendando que tomen medidas inmediatas para evitar nuevos colapsos.
Este suceso pone en evidencia la vulnerabilidad de las construcciones costeras frente a fenómenos climáticos extremos y resalta la importancia de tomar precauciones para proteger tanto las propiedades como a las personas en zonas propensas a desastres naturales.