Cuando uno viaja por Europa en avión, suele encontrarse cada vez más con que las aerolíneas tienen rutas en las cuales realizan un stop over en Islandia. Estas escalas se están volviendo tan populares que varias compañías ya ofrecen realizar stop over de algunos pocos días en Islandia, incluso sin costos adicionales.
Cuando hablamos de Islandia, no es erróneo afirmar que se trata de una isla casi despoblada y lejana, debido a su ubicación en el extremo norte del globo terráqueo. Pero sin dudas es un país que se encuentra en pleno crecimiento.
Posee amplias extensiones de tierras donde lo que abundan son maravillas naturales, volcanes, géiseres y glaciares, que lo convierten en el lugar ideal para los amantes de la aventura y la naturaleza. Sin mencionar que es uno de los pocos lugares donde podrás tener la suerte de quedar sin aliento al disfrutar de las auroras boreales.
Entonces, si tenés la suerte de elegir un vuelo con una parada como esta, en este post vas a poder encontrar cuáles son algunas actividades para realizar en Islandia en poquitos días:
Del aeropuerto a Reykjavik
El aeropuerto de la capital de Islandia queda a solo 50 minutos del centro de la ciudad. Si vas a estar pocos días durante el stop over, quizás la mejor opción sea alquilar un automóvil para no depender de las compañías de transporte o agencias de turismo. Conducir por Islandia es mucho más fácil de lo que parece.
Sin embargo si buscas la opción más económica, a la salida del aeropuerto se encuentran los colectivos que te llevan a Reykjavik, con bastante frecuencia.
1. Manejar por la ruta del Círculo Dorado
Justo al este de Reykjavik se encuentra el famoso Golden Circle. Solo se necesitan poco más de 3 horas para recorrer por completo la ruta, pero sin dudas te llevará algunas horas más si sos de los que paran a disfrutar de cada paisaje.
Conducir alrededor del Círculo Dorado en tu escala en Islandia es sin dudas la mejor manera de ver lo mejor que este país tiene para ofrecer. Las paradas obligadas son: el Parque Nacional veingvellir, la Cascada de Gullfoss, el Kerid Crater y el Geysir.
Dependiendo de la época del año en que hagas tu visita, la experiencia por el Golden Circle puede variar. Principalmente teniendo en cuenta que durante los meses de invierno, el clima puede jugarte una mala pasada.
2. Bucear en la Falla de Silfra
Podría sonar un poco raro, pero Islandia es un excelente lugar para el buceo. Esto se debe a que cuenta con un lugar único en todo el planeta, la Falla de Silfra. Esta formación es un ensanchamiento de la gran falla que separa continuamente las placas tectónicas de Europa y América.
Para realizar esta actividad hay que contratar alguna agencia o tour de buceo, que si bien no son de lo más económico, definitivamente valen la pena.
Son por lo general 4 horas de buceo, durante la mañana o la tarde, aunque recomendamos hacerlo por la tarde, ya que la temperatura exterior es más agradable. Esto es importante, ya que las aguas del lago tienen temperaturas bajo cero casi todo el año.
3. Visitar la Laguna Azul
Una de las atracciones principales de Islandia es la Laguna Azul. Ubicada en el suroeste de Islandia, a 39 km de Reykiavík y a 13 km del aeropuerto internacional de Keflavík, es uno de los lugares más visitados de Islandia, por su situación ideal y por ser un sitio único. Es un gigante balneario de aguas termales de un color azul turquesa situado sobre un campo de lava.
Solo se permite entrar a cierta cantidad de personas en la laguna al mismo tiempo, por lo que recomendamos comprar las entradas con anticipación. El mejor momento para visitar la laguna es durante la mañana, bien temprano, ya que luego se va llenando de gente con el transcurso del día.
4. Recorrer y disfrutar de Reykjavik
Reykjavik, capital más al norte del mundo, combina edificios coloridos, gente amable, un diseño deslumbrante y una interesante vida nocturna. Ciudad pesquera pero cosmopolita, con nada que envidiarle a Londres o París, ya que también está cargada de arte, opciones culinarias ricas y geniales cafés y bares.
Los museos y galerías de arte de la capital son perfectos para ver qué las obras de lo que hacían los antepasados de los ciudadanos de hoy en día. No hay que dejar de visitar el excepcional Museo de Arte de Reikiavik y la Galería Nacional.
