Arabia Saudita planea construir una ciudad colosal denominada “megaciudad NEOM”, y parece extraída de una película de Ciencia Ficción. El megaproyecto que fue anunciado a principios de 2021 por el príncipe heredero de Arabia Saudita, Mohammed bin Salman, tendrá un costo de casi un billón de dólares.
Entre las piezas estructurales del proyecto, se encuentra la construcción de dos rascacielos espejados, denominados ‘Mirror Line’, que incorporarán agricultura vertical integrada en los edificios. Además, se construirá un puerto deportivo para yates debajo de un arco entre los dos edificios, al igual que un estadio deportivo a 300 metros de altura.
La ciudad fue concebida por el príncipe Bin Salmán para diversificar la economía del reino y dejar de depender del petróleo, así como para atraer inversiones extranjeras y crear miles de nuevos puestos de trabajo.
La ciudad lineal, la primera de su tipo, será una zona de contaminación cero y se extenderá desde la costa del Mar Rojo hacia el interior del desierto. Otro plan ambicioso para el megaproyecto, incluye un tren de alta velocidad que pasará por debajo de los edificios espejados.
Con la fecha límite de finalización en 2030, el proyecto se enfrenta al desafío de la curvatura de la tierra. Por otro lado, la inmensidad de los rascacielos provocarán falta de luz solar; hecho que según los expertos, podría ser perjudicial para la salud de los residentes.
Otro punto a resolver será la gestión de la migración de millones de aves, a través de los corredores que cruzarán las enormes edificaciones. Además, existe la preocupación de que el enorme tamaño de la construcción, cambie la dinámica del flujo de aguas subterráneas y restrinja así, el movimiento de varios animales.