En las cercanías del río Nilo, en el sitio arqueológico de Athribis, un grupo de arqueólogos ha desenterrado una monumental entrada a un antiguo templo ptolemaico. Este descubrimiento, que destaca por su magnitud y detalles arquitectónicos, ofrece una nueva perspectiva sobre el período en que Egipto estuvo bajo la influencia de la dinastía descendiente de Alejandro Magno.
La entrada, compuesta por un imponente pilono de 45 metros de ancho, muestra bloques de arenisca finamente tallados y jeroglíficos que narran historias mitológicas. Según los especialistas, la estructura habría alcanzado los 18 metros de altura, comparable al pilono del Templo de Luxor. Inscripciones encontradas en las paredes interiores revelan representaciones del rey Ptolomeo VIII dando la bienvenida a la diosa Repyt, asociada al templo de Athribis.
El templo data del siglo II a.C. y combina elementos de la arquitectura griega con tradiciones egipcias, reflejando la fusión cultural característica del período ptolemaico. Los arqueólogos también han identificado pilares, bases y salas decoradas con relieves que sugieren la importancia ceremonial y política de este lugar en su época.
Un descubrimiento adicional incluye una habitación oculta en el segundo piso del pilono, accesible por una puerta exterior. Aunque fue destruida en el siglo VII d.C., se cree que pudo haber sido utilizada con fines ceremoniales.
Este hallazgo forma parte de un proyecto arqueológico que ya lleva 21 años en curso y que ha revelado más de 30,000 artefactos. A medida que continúan las excavaciones, los expertos esperan descubrir más detalles sobre la vida religiosa y social en Egipto durante este fascinante período histórico.