Cinco veces el tamaño de París y visible desde el espacio, la próxima central energética en construcción en el desierto de sal al oeste de la India está destinada a convertirse en un hito en la industria de la energía limpia. Con suficiente capacidad para abastecer de electricidad a todo un país como Suiza, este proyecto representa una ambiciosa apuesta por un futuro más sostenible.
El responsable detrás de esta gigantesca obra es Sagar Adani, director ejecutivo de Adani Green Energy Limited (AGEL), una empresa impulsada por la visión de adoptar energías renovables a gran escala. No obstante, Adani no es solo un líder empresarial en este campo, sino también parte de una familia cuya influencia se extiende a través de diversos sectores económicos en la India.
Gautam Adani, tío de Sagar y segundo hombre más rico de Asia, ha construido su imperio a partir del Grupo Adani, conocido por sus negocios en importación de carbón y actividades extractivas. Sin embargo, AGEL representa un cambio de paradigma dentro de este conglomerado, enfocándose en la construcción de una central solar y eólica en Gujarat, con una inversión estimada en US$ 20.000 millones.
Cuando esté terminada en aproximadamente cinco años, esta central será la mayor de su tipo en el mundo, y se espera que produzca suficiente electricidad limpia para abastecer a millones de hogares en la India. Este proyecto no solo promete un suministro energético más sostenible, sino que también establece un precedente para otras economías en transición hacia fuentes renovables.
La magnitud de esta iniciativa subraya el potencial transformador de la energía limpia en la lucha contra el cambio climático y la dependencia de combustibles fósiles. Con Adani a la cabeza, AGEL está liderando un camino hacia un futuro más verde, donde la innovación y la voluntad de cambio son las fuerzas impulsoras detrás de una nueva era energética.
