10 palacios de Buenos Aires que no debes dejar de visitar

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Redactora / Travel writer

A la Ciudad de Buenos Aires se la conoció comola París de Sudamérica, especialmente durante el apogeo de la Belle Époque entre los años 1890 y 1920. Visitar la ciudad, especialmente el norte de Buenos Aires, hace que un viajero pueda recorrer sus construcciones y mentalmente teletransportarse a París, gracias al parecido de sus construcciones y rinconcitos pintorescos.

Parte de estas construcciones fueron palacios y eso mismo es lo que te listaremos en este post: un recorrido por 10 palacios de Buenos Aires que todo aquel que visita la ciudad debería fotografiar.

Los mejores palacios de Buenos Aires para conocer

1. Palacio Ortiz Basualdo

“La fachada debe ser monumental”. Así es como le describió la familia Ortiz Basualdo al arquitecto Pater para su diseño. La antigua mansión de los Ortiz Basualdo hoy en día es la Embajada de Francia y cada detalle fue pensado para que los residentes puedan vivir al mejor estilo de la nobleza europea.

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Palacios de Buenos Aires: Palacio Ortiz Basualdo. Foto: Wally Gobetz

Generalmente las visitas a su interior están restringidas, con excepción de algunos días en particular, aunque el solo hecho de admirar su fachada hace que uno se traslade a París.

2. Palacio Bosch Alvear

Ubicado sobre la Avenida del Libertador, una de las emblemáticas de la Ciudad de Buenos Aires, el Palacio Bosch Alvear supo ser la residencia del embajador Ernesto Bosch desde el año 1917 hasta 1929, año donde comenzó allí a funcionar la sede de la Embajada de Estados Unidos en Argentina.

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Palacios de Buenos Aires: Palacio Bosch Alvear. Foto: Embajada de EEUU en la Argentina

Según la historia, René Sergent se inspiró en el castillo de Benouville en Normandia.

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Palacios de Buenos Aires: Palacio Bosch Alvear. Foto: Embajada de EEUU en la Argentina

3. Palacio Errazuriz

Otra de las obras del arquitecto francés, René Sergent, en la Ciudad de Buenos Aires se refleja en el Palacio Errazuriz, diseñado en el año 1911 y construido, en su mayoría, por materiales importados desde Europa. La familia Errazuriz (diplomáticos) solo residieron durante 20 años, momento en el cual comenzó a funcionar la sede del Museo Nacional de Arte Decorativo, la Academia Argentina de Letras, la Academia Nacional de Bellas Artes y el Museo Nacional de Arte Oriental.

4. Palacio Duhau

¿Imaginas dormir en un antiguo palacio en la Ciudad de Buenos Aires? La que supo ser la residencia de la familia Duhau, hoy en día es el Hotel Park Hyatt, el hotel 5 estrellas de renombre internacional. La construcción del palacio se encuentra inspirada en su totalidad en el Château du Marais, a pocos kilómetros de París, en Francia.

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Palacios de Buenos Aires: Palacio Duhau. Foto: Andrew Milligan sumo

5. Palacio Alvear

La familia Alvear-Ortiz Basualdo era una de las familias más representativas de la aristocracia “porteña” de principios del siglo XX. Durante su residencia en París en 1920, ordenaron la construcción de un palacio inspirado, claro está, en la arquitectura francesa del mismo período.

Desde el año 1924, la joven y prácticamente sin uso construcción fue vendida al Rey Víctor Manuel III y hoy en día es la residencia de los embajadores de Italia.

6. Palacio Fernández Anchorena

Sobre la misma Avenida Alvear del barrio de Recoleta, al norte de la ciudad de Buenos Aires, se sitúa el edificio que alberga la Santa Sede, la Nunciatura Apostólica o, como popularmente se lo conoce, la Embajada del Vaticano, sitio donde ha descansado Juan Pablo II durante sus dos visitas al país. Siguiendo con la línea de la arquitectura francesa, el palacio Fernández Anchorena responde al estilo Art Nouveau.

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Palacios de Buenos Aires: Palacio Fernández Anchorena. Foto: Wally Gobetz

7. Palacio Pizzurno

En el mismo barrio, se encuentra emplazado uno de los Monumentos Históricos Nacionales, construido por el arquitecto argentino Altgelt siguiendo el estilo, claro que sí, francés (aunque con algunos eclecticismos), el Palacio Pizzurno.

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Palacios de Buenos Aires: Palacio Pizzurno. Foto: Gragry

Hoy en día es la sede del Ministerio de Educación de la Nación y la Biblioteca Nacional de Maestros y se encuentra ubicado sobre la calle del mismo nombre, a la altura 935, perfecto para no perderlo de vista.

8. Palacio Barolo

Si alguien conoce algún palacio de la ciudad entonces ese es el Palacio Barolo, comenzado a construir en el año 1919 y, en su momento, el más alto de Sudamérica. El Palacio Barolo se encuentra ubicado en la mítica Avenida de Mayo y, según cuenta la historia, el gran faro giratorio que se encontraba en su cúpula, era divisible desde Uruguay. Hoy en día es un edificio exclusivamente de oficinas.

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Palacios de Buenos Aires: Palacio Barolo. Foto: Linda De Volder

9. Palacio Paz

Una mansión inaugurada en el año 1912 como uso residencial, hoy forma parte del Círculo Militar, ubicada frente a la Plaza San Martín, en el barrio porteño de Retiro.

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Palacios de Buenos Aires: Palacio Paz. Foto: Phillip Capper

La majestuosidad del estilo francés de la construcción nunca pudo ser admirada por su dueño, que falleció pocos meses antes de la inauguración. En la actualidad se realizan visitas guiadas ciertos días de la semana para los viajeros curiosos.

10. Palacio Pereda

Otra de las actuales embajadas y, sobre la misma Avenida Alvear de la que venimos “transitando”, es el Palacio Pereda, actual residencia del Embajador de Brasil en Argentina. Al encontrarse en un barrio tan turístico y próximo a la Avenida 9 de Julio (la más importante de la ciudad) la fachada del Palacio Pereda llama muchísimo la atención, principalmente por su color blanco impoluto y su diseño 100% francés, inspirado en el Museo Jacquemart André de París.

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Palacios de Buenos Aires: Palacio Pereda. Foto: Mariya Prokopyuk

Recorrer los palacios de Buenos Aires llevan a “perderse” en un plano donde es posible confundir sus construcciones con la capital francesa, un fiel reflejo de la “Belle Époque” y de los años de apogeo de la capital argentina.

Agradecemos la foto de portada: Mariya Prokopyuk

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