Como hemos ya abordado en otras notas y/o historias de viajeros, trabajar en la Antártida puede ser bastante más accesible de lo que cualquiera creería. Si bien es cierto que las actividades más importantes en el lugar son las relacionadas con la ciencia, y se hace soberanía mediante los trabajos científicos que cada país, con intereses en el continente, realiza; también hay lugar para puestos vinculados con el ocio como ser trabajar en un crucero en la Antártida.
Así es posible encontrar desde voluntariados y/o tareas específicas en las famosas Bases que desarrollan actividades en el marco de estaciones científicas hasta propuestas vinculadas al rubro turístico en las que una de las principales premisas es garantizar el mejor entretenimiento de turistas que buscan un destino exótico y singular para vacacionar.
Todas son posibilidades que te hacen pisar el continente más austral de la Tierra y vivir, sin dudas, una de las experiencias más fascinantes que puedas imaginar. Eso mismo es lo que está haciendo Tommi Millot, un joven argentino que ha podido llegar hasta semejante lugar gracias a una oferta de trabajo en un crucero cuyo itinerario destaca por la llegada hasta la Antártida.
En una charla exclusiva con Intriper, Tommi revela cómo aplicó a tal propuesta laboral y cómo fue el proceso hasta quedar seleccionado por la compañía: “Vi el anuncio por Internet, en una página francesa que se llama L’Hôtellerie Restauration, es para buscar trabajo”, explica sobre un portal específico para profesionales de la hostelería donde es posible encontrar información sobre búsquedas laborales, trabajos y hasta detalles de sus respectivos anunciantes.
El anuncio no especificaba nada más que la imagen de un crucero, la remuneración ofrecida, la especificación de que se trataba de un contrato internacional y la condición excluyente de saber inglés para poder aplicar: “Solo decían que se pedía inglés. Nada más que eso”.
“Mandé mi curriculum por probar suerte, y al día siguiente me llamaron. Un mes y medio después ya estaba embarcando en Chile, empezando un contrato de 5 meses”. Consultado sobre qué aspectos creería que pueden haber sido de ayuda para ser seleccionado en un trabajo como este, Tommi explica que, sin dudas, es manejar idiomas: “Tengo la suerte de hablar francés, español y inglés, y la verdad que sirve un montón”.
La compañía en cuestión es nada más y nada menos que Ponant, un operador francés de cruceros que fue fundado en abril de 1988 por Philippe Videau, Jean-Emmanuel Sauvé y otros oficiales de la marina mercante francesa. Una de sus embarcaciones es “Le Boreal”, en la cual está a bordo Tommi. La misma se destaca por una capacidad de hospedar hasta 264 pasajeros en 132 cabañas y suites, 145 tripulantes a bordo para desarrollar las diferentes tareas necesarias, un Spa y 2 restaurantes.
¿Cómo fue ese llamado en el cual comentaron acerca de los requisitos y sus responsabilidades? “Me llamaron primero a mi celular, haciéndome preguntas sobre mi. Luego me volvieron a llamar esa misma tarde por Skype, donde tuve una videollamada de aproximadamente 30 minutos donde me explicaban todo sobre el puesto y la empresa”.
Gracias a haber aceptado, Tommi trabaja actualmente en la parte del restaurante del crucero. Necesita sí o sí estar a bordo cuando los pasajeros están arriba de la embarcación pero, cuando las personas se van de excursión, ya no necesita estar dentro, por lo cual puede salir junto con ellos y aprovechar también su visita a los destinos involucrados en la experiencia de viaje.
“Siempre quise aceptar por el tema de la experiencia. Tuve dudas más que nada por el tema de estar tan desconectado. Soy joven, amo internet, y no sabía cómo iba a estar 4 meses y medio así.», responde ante la pregunta de si tuvo dudas a la hora de aceptar la experiencia.
¿Cuáles creés que son los beneficios que te ha dado esta experiencia hasta el momento?
Tommi responde: «La suerte de conocer uno de los lugares más únicos del mundo, donde muy poca gente tiene la suerte de poder viajar. Me lo voy a guardar como una experiencia y recuerdos para toda la vida… se lo recomiendo a todo el mundo«.
Un comentario
No es todo verdad. Seguro te piden los cursos STCW. Tal vez la empresa los provee, pero siempre piden eso.