Cada vez los 30 grados se alcanzan antes en España: si, por ejemplo, durante la década de los sesenta y los ochenta el primer día de verano se registraba por primera vez a principios de mayo, ahora se alcanza en abril, de media. Sin dudas, esto genera un alerta ante el registro de un «verano adelantado» en el país y las consecuencias que esto podría ocasionar con el devenir del paso de los años.
“El verano le come terreno a la primavera y esto cada vez va a ser más habitual”, es como define tal escenario Rubén del Campo, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Según levanta el medio local La Vanguardia, «el cambio climático dilata el verano en el tiempo y recorta parte de la primavera y un buen trozo de otoño».
Según cifras y relevamientos arrojados por el último informe del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), se prevé que las temperaturas en la Península Ibérica aumenten en torno a 2,5 ºC de aquí a finales de siglo si no se toman medidas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
En efecto y de acuerdo a lo que registran los organismos especializados, la masa de aire podría ser la más cálida situada sobre el territorio para estas fechas en, al menos, los últimos 43 años. En los últimos días han circulado impresionantes imágenes de tierras yermas que muestran el impacto de un calor récord en el país europeo: las temperaturas están disparadas en España y las imágenes de drones muestran cómo la ola de calor y la falta de lluvia están secando los embalses del país.
España atraviesa una ola de calor inusual para la primavera, con temperaturas «hasta 15 o 20» grados superiores a la media. En paralelo y como consecuencia, Cataluña enfrenta también su peor sequía en décadas.
Se trata de una masa de aire de origen africano sobre la Península que estuvo propiciando un «excepcional e insólito» ascenso de las temperaturas, algo más propio del mes de julio que del mes de abril, haciendo que la temperatura se elevara hasta los 39-40 grados en Sevilla, 35 grados en Zaragoza, 33 grados en Madrid y 30 grados en Burgos.
