Con un original diseño presentado por el estudio de arquitectura MVRDV con sede en los Países Bajos, China se prepara para albergar pronto una imponente obra de arte que se consolidaría también como una de las bibliotecas más grandes del mundo: con una superficie de 140 mil metros cuadrados, el espacio cultural estará ubicado en la ciudad de Wuhan.
Wuhan, la extensa capital de la provincia Hubei en el centro de China, se destaca por ser un importante centro comercial dividido por los ríos Yangtsé y Han. La ciudad tiene una cuota de naturaleza cubierta gracias a la presencia de muchos lagos y parques; ahora, para equilibrar el aspecto cultural de la localidad, se creará un nuevo espacio pensado 100% para el desarrollo de la comunidad.
Se trata de la construcción de una de las bibliotecas más grandes del mundo que, sin nombre oficial a la vista, combinará diversos espacios de estudio, salas de estar y lectura, en un enorme y moderno edificio que se conecta con su entorno a partir de un diseño muy particular: a juzgar por las imágenes difundidas sobre el proyecto, el edificio destacará por una forma fluida distintiva de tres caras que celebra la posición de la «ciudad de los 100 lagos» en la confluencia de dos ríos.
Según ha trascendido, cada una de las tres fachadas de cristales proporcionará al interior vistas de diferentes puntos de la ciudad, incluido el horizonte del Distrito Central de Negocios (CBD, por sus siglas en inglés), un parque adyacente y la plaza contigua en la planta baja. «Esto es naturaleza versus ciudad, y el edificio de alguna manera se enfoca en esto. Creo que esto lo convierte en un lugar emocionante para reunirse. La topografía de Wuhan fue una importante fuente de inspiración: tenemos esta idea de una vista horizontal hacia los lagos y, por otro lado, tenemos una vista más vertical hacia la ciudad con los rascacielos», han compartido desde el estudio de arquitectura MVRDV.
De esta manera, se espera que la biblioteca se convierta en un nuevo hito reconocible para Wuhan ya que albergará tanto literatura y servicios de información, así como también recursos de investigación e innovación científica y tecnológica. En paralelo, se consolida como un espacio pintoresco para ser visitado por locales y turistas: contará con terrazas escalonadas de libros y un amplio espacio público en la planta baja que los visitantes pueden disfrutar durante todo el día.
En cuanto a la operatividad del edificio, y en línea con las tendencias de arquitectura moderna en un mundo que aspira a ser cada vez más responsable con el medio ambiente, se instalarán varios paneles solares en el techo de la estructura de la biblioteca para proporcionar energía renovable y evitar la contaminación ambiental.
