Después de más de dos meses de aislamiento, la ciudad china de Wuhan, cuna del coronavirus, vuelve a respirar.
Este sábado, el metro ha vuelto a circular por la ciudad de Wuhan después de 65 días de suspensión y se reanudó la circulación en las autovías. Sin dudas, este gran paso le da esperanza al resto del mundo, al ver cómo la el epicentro de la pandemia, lentamente comienza a recuperar la actividad.
La medida generó que una gran cantidad de habitantes regresara a sus casas, luego de haber estado alejados de su ciudad al menos por diez semanas, tiempo que duró la cuarentena obligatoria.
Incluso, desde la semana pasada algunos ciudadanos han podido disfrutar del privilegio de salir de sus casas para pasear o comprar. Lo han hecho de forma escalonada y en las zonas en las que se había verificado que no se había registrado ningún contagio durante más de siete días.
Entre el miedo de que la enfermedad regrese con casos importados, y las ganas de volver a la vida previa al brote de Covid-19, en la capital de la provincia de Hubei las autoridades comenzaron a levantar las restricciones.
Cabe aclarar que esta reapertura solamente es parcial: todos los habitantes tendrán que esperar hasta el 8 de abril para poder salir de Wuhan, cuando finalice la cuarentena y los aeropuertos de la ciudad volverán a estar operativos.
En el resto de la provincia de Hubei ya se ha levantado el confinamiento y se ha reanudado el transporte. En Pekín la normalidad avanza e incluso se ha podido ver tráfico denso en los anillos de circunvalación. Durante el fin de semana se han formado colas en las entradas de los parques para pasar los controles de temperatura y el público ha hecho su aparición en los centros comerciales.
Algunas secciones de la Gran Muralla ya son accesibles al público, al igual que otros lugares turísticos en todo el país.
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“Quedate en casa”: La nueva campaña de (anti)turismo que es tendencia en Argentina
“Todo lo que hay para hacer va a seguir estando cuando puedas volver“, “Reprogramá tu viaje, quedate en casa” son algunos de los mensajes que se pueden distinguir en los canales de comunicación de los organismos de promoción turística de las distintas provincias y ciudades de Argentina.
Sorprendentemente, las producciones audiovisuales y los copy que acompañan fotografías alucinantes ya no lucen acompañadas de incitaciones a viajar tales como “¿Qué estás esperando?“, “Es el mejor momento para conocer nuestros paisajes“, o “¡Te esperamos pronto!“.
Sí, sorprendentemente. Pero que sea algo sorpresivo no significa que resulte desafortunado. Si no mas bien todo lo contrario. En un contexto mundial de alerta por la propagación del COVID-19, considerado como una pandemia por el alcance global que ha adquirido, en el que países cierran sus fronteras y se declaran en estado de cuarentena para evitar la circulación de personas, la máxima recomendación indica quedarse en casa. De hecho, así es como ha surgido #YoMeQuedoEnCasa, una moderna invitación a sumarse a una comunidad virtual que promueve el guardarse dentro de los hogares.
En consecuencia, es una época de crisis para el turismo, rubro que se ha visto en la obligación de suspender la actividad típica de aerolíneas, agencias de viajes, hoteles, prestadoras de servicios turísticos, atracciones turísticas, espacios de naturaleza y áreas culturales, a fines de evitar, por un lado, el traslado de ciudadanos de diferentes nacionalidades entre las cuales podrían estar los países considerados como de alto riesgo y, por otra parte, la concentración de personas y la posibilidad de que el virus se propague con mayor facilidad. Continuar leyendo…
