Este hombre hace viajes en barco de 14 horas cada semana para alimentar a toda una ciudad en Alaska

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¡Todo un ejemplo! El propietario de un supermercado en un área remota de Alaska, a la que solo se puede acceder en barco o avión, ha hecho una increíble donación para suministrar alimentos a su comunidad durante la actual crisis de salud.

Toshua Parker es propietario de Icy Strait Wholesale en Gustavus y ha estado viajando semanalmente en viajes en barco a Juneau, a 50 millas de distancia, para abastecerse de alimentos y suministros esenciales para toda su ciudad.

Toshua y su personal tardan alrededor de 14 horas en completar el viaje en una antigua embarcación de aterrizaje militar de 96 pies de largo.

Con la ayuda de sus empleados y pescadores locales, Toshua ha estado haciendo viajes al continente una vez por semana desde marzo, organizándolos en función del clima y las mareas.

Allí, compran suministros en el conocido supermercado mayorista Costco y los cargan en el bote, antes de partir hacia Gustavas. Sin embargo, ha habido un par de veces en que una tormenta ha golpeado a su regreso, y se han visto obligados a regresar a Juneau, descargar los alimentos en un refrigerador y luego esperar hasta que sea seguro volver a cargar y partir una vez de nuevo.

Man Makes 14-Hour Boat Trips Every Week To Feed His Entire City

Orgulloso, Toshua ha elogiado a su personal por «ir a trabajar todos los días durante esta pandemia para asegurarse de que nuestra ciudad se mantenga abastecida», y agregó que su ciudad siempre encontrará medios de supervivencia.

‘La ciudad necesitaba ser abastecida con víveres, así que hicimos lo que fue necesario para que eso sucediera. Solo otro día en nuestro mundo «, dijo. «El año que viene será otro obstáculo que vencer y nos haremos cargo».

¡Buen trabajo!

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Abuela, de 82 años, le pide más vino a su familia para el aislamiento

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El autoaislamiento es un trabajo difícil, pero una mujer ha demostrado que puedes mantener un estado de ánimo divertido durante una pandemia.

Cuando Kelly Muller fue a ver a su madre a su casa en Ontario, Canadá, se echó a reír ante el cartel que había hecho la mujer de 82 años. No estaba pidiendo más comida o algunas recomendaciones de Netflix; ella simplemente había pedido más vino

En declaraciones a Today, Kelly dijo: “Ella vive sola todavía en nuestra casa familiar. “Ese día, me detuve y toqué la bocina para hacerle saber que estaba allí y que estaba lista para mí. Tenía un cartel listo para pedirme que le trajera más vino.

“No me sorprendió levantarme y verla sosteniendo un letrero hecho a mano. Le pregunté qué tipo, y ella dijo: ‘¿Rojo? ¿Blanco? No me importa. ¡Todos saben igual!’“.

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