Inspectores de vida silvestre han incautado alrededor de 635 kilogramos de aletas de tiburón en un puerto de Miami, procedentes de Sudamérica con rumbo a Asia, según informaron autoridades el lunes.
Las cajas fueron falsamente declaradas y mezcladas con otras especies que no están protegidas o cuyo comercio no esté regulado.
El cargamento de aletas secas, empacado en 18 cajas, tiene un valor comercial de entre 700.000 y 1 millón de dólares, dijo el Servicio Federal de Pesca y Vida Silvestre de Estados Unidos.
Decenas de millones de tiburones son cazados al año por contrabandistas que cortan las aletas de los animales mientras están vivos, según grupos conservacionistas.
Hasta el momento no se han reportado arrestos, pero las autoridades continúan investigando.
Las aletas de tiburón son muy populares en varios países de Asia, principalmente en China, donde se usan sobre todo para hacer sopas.
En los Estados Unidos, 13 estados y tres territorios han prohibido el comercio, la venta y la posesión de aletas.
Muchas especies de tiburones se encuentran actualmente en peligro debido a esta práctica de pesca de aletas.
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