Se realizó un evento de boxeo en Nicaragua, en medio de la pandemia mundial de coronavirus.
La controvertida pelea de boxeo tuvo lugar en una arena frente a una escasa multitud. Las chicas del ring llevaban máscaras faciales, y todos los luchadores fueron rociados con desinfectante antes de participar.
En un mundo en el que el deporte en vivo se ha convertido en un recuerdo lejano, el evento fue televisado en el país y tuvo a algunos fanáticos presentes.
El promotor del programa, Rosendo Alvarez, ex campeón mundial en dos ocasiones, desestimó las preocupaciones sobre el virus en curso, lo que sugiere que la necesidad de que los combatientes trabajen para alimentar a sus familias superó las preocupaciones sobre la propagación de la enfermedad.
Álvarez, conocido durante su carrera como ‘El Bufalo’, dijo: «Aquí no tememos al coronavirus, y no hay cuarentena. Las tres muertes (reportadas hasta ahora por el Ministerio de Salud) vinieron de afuera y nadie dentro del país ha sido contaminado».
Agregó: «Nicaragua es un país pobre y los boxeadores tienen que comer. No pueden quedarse encerrados en su casa».
Para intentar atraer una corona al evento, Álvarez ofreció boletos gratis, pero solo logró llenar una décima parte del gimnasio Alexis Argoello con capacidad para 8.000 personas.
La asistencia oficial no se anunció realmente. Sin embargo, parecía que las personas que se presentaron lograron al menos mantener una distancia social segura entre sí.
La tarjeta presentó cuatro combates de seis rondas, y también un evento principal que enfrentó a Ramiro Blanco contra Robin Zamora en ocho rondas.
Todo se transmitió por televisión en la emisora estatal de Nicaragua, Canal 6. También se mostró en ESPN Latinoamérica a través del programa ESPN KnockOut.
A pesar de que tal vez no sea el principal interés mundial en este evento, Zamora llegó a la cima y agregó una victoria número 16 a su récord profesional.
Un taxista llevó a una estudiante varada, desde España a Italia, totalmente gratis
Un estudiante italiano se quedó varado en España, sin la posibilidad de volver a su casa. Pero, un taxista generoso entró en acción, conduciéndola durante 12 horas para llevarla a casa, totalmente gratis.
La estudiante, Giada Collalto, de 22 años, había estado estudiando idiomas en Bilbao, España, desde el 1 de febrero y esperaba estar allí hasta fines de junio, informó CNN. Pero cuando COVID-19 llegó a Europa, sus clases presenciales fueron canceladas, sus compañeras de cuarto abandonaron su departamento, y Collalto, de Montebello, Italia, comenzó a tratar de encontrar la manera de volver a casa.
“Cuando comenzó la pandemia de coronavirus, decidí quedarme en España y ver cómo iban las cosas”, dijo Collalto a CNN, y agregó que después de un tiempo quedarse “ya no tenía sentido”. Continuar leyendo…
