La amamos: una abuela oriunda de Lancashire, en Inglaterra, olvidó sus anteojos antes de ir a la tienda y creyó que había comprado una caja de bolsitas de té, solo para llegar accidentalmente a su casa con un paquete gigante de condones.
Rosemarie Riley se acercó hasta la tienda Asda para comprar té, pan y comida para sus perros. Sin embargo, después de olvidar sus especificaciones, metió accidentalmente un paquete de 30 condones Durex Thin Feel en su cesta, creyendo que eran bolsitas de té Tetley.
Pero su error solo salió a la luz después de que su esposo John Riley, de 78 años, le preguntara por qué había gastado tanto dinero en la tienda: un total de £26.75.
Poco después, Rosemarie le suplicó a su nieta Gemma que le devolviera los condones para regresarlos a la tienda. Pero como era de esperar, la joven de 29 años ya estaba llorando de risa.
Después de compartir el error de compras de su abuela en Facebook, la publicación se volvió viral rápidamente, acumulando más de 12,000 me gusta.
«La abuela se fue y trajo estos de Asda pensando que eran bolsitas de té, y su maravillosa nieta tiene el trabajo de devolverlos. Entonces, por favor, si alguien me ve devolviéndolos, no juzguen. Sé que Valentine está a la vuelta de la esquina, pero no los uso y le costaron £26. Todo lo que quiere son sus bolsitas de té de Yorkshire «, dice la cómica publicación.
Gemma regresó a Asda esa misma noche y les explicó lo que sucedió a los empleados. Afortunadamente, el personal lo encontró tan divertido como ella.
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Esta abuela puede leer su guía telefónica gracias a los dibujos de su nieto
Emocionante: Encarna Alés es una abuela de 74 años oriunda de Jaén, España, a la que le gusta mucho hablar por teléfono. Y cada vez que quiere hacerlo, cuenta con una agenda bastante peculiar que su nieto Pedro le ha estado preparando los últimos veinte años.
Encarna ha llevado una vida entera de mucho trabajo y no tuvo tiempo para los estudios, por lo cual, no sabe leer ni escribir. Sin embargo, la solución a este problema es obra de su nieto Pedro Ortega.
Pedro ha dibujado una guía telefónica para su abuela durante los últimos 20 años. Cada una de las páginas tiene un par de números de teléfono y el nombre de la persona o lugar a la que corresponden, pero también un dibujo; y es que su abuela identifica esos dibujos con la persona a la que quiere llamar.
