Los bomberos estadounidenses que aterrizaron en Australia para unirse a la lucha contra los devastadores incendios forestales recibieron un emocionante aplauso cuando llegaron al aeropuerto de Sydney.
La crisis de incendios forestales en Australia ha destruido hasta ahora más de 2.000 hogares, mató al menos a 26 personas y se cree que mató al menos a mil millones de animales, pero está lejos de terminar.
En un intento desesperado por controlar los incendios, 100 bomberos de los Estados Unidos fueron enviados para apoyar a los 159 que ya están allí, según las autoridades.
El Comisionado del Servicio de Bomberos Rurales de Nueva Gales del Sur, Shane Fitzsimmons, compartió un video de algunos residentes que esperan en el aeropuerto para darles una cálida bienvenida a los recién llegados a Sydney, antes de hacer su viaje a Victoria.
Su llegada se produce luego de que 20 bomberos del Bosque Nacional de Los Ángeles fueran enviados a Australia el lunes por el Centro Nacional Interagencial de Bomberos (NIFC) de EE. UU.
NIFC lidera las misiones estadounidenses de lucha contra incendios forestales, sin embargo, ha desplegado algunos de sus bomberos en el extranjero durante los meses de invierno, incluidos los enviados a Australia.
Su portavoz, Carrie Bilbao, dijo que los bomberos estaban recibiendo capacitación sobre los muchos insectos y serpientes venenosas con las que se encontrarían durante su misión.
Los incendios forestales que asolan el país han dejado por lo menos 25 personas y millones de animales muertos. EEUU planea enviar más bomberos a Australia para ayudar con la tragedia.
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El comunicado indica que los incendios provocaron la muerte de miles de koalas, junto con otras especies icónicas como canguros, ualabíes, petauros, canguros rata, cacatúas y aves de la familia Meliphagidae.
El director de WWF Australia aseguró que los daños tardarán muchos años en recuperarse y que algunas de las especies podrían terminar incluso al borde de la extinción.
