En Francia se aprobó una propuesta de ley que busca poner un fin al maltrato animal, a través de la prohibición de venta de perros y gatos en las tiendas de animales y otras medidas que buscan limitar la presencia de animales salvajes en circos.
La propuesta fue aprobada por el Legislativo francés el pasado jueves, 18 de Noviembre, con la clara finalidad de «luchar contra el maltrato animal» a través de la prohibición de la venta de crías de gatos y perros en tiendas de animales, así como también la anulación, de forma progresiva, de la participación y presencia de animales salvajes en circos. Además, esta medida también busca establecer penas más severas para aquellas personas que maltraten o abandonen a sus mascotas.
En Francia, una de cada dos personas cuenta con un animal de compañía y, lamentablemente, según informó el sitio de noticias Deutsche Welle, cada año se abandonan alrededor de 100.000 mascotas. Por su parte, esta medida aprobada el pasado jueves, busca reducir ese número y evitar el maltrato. Los animales de compañía no son «ni juguetes, ni bienes, ni productos de consumo», dijo Julien Denormandie, ministro de Agricultura, en su cuenta de Twitter, al tiempo que celebraba este gran avance.
Esta nueva medida también establece que el hecho de matar de forma voluntaria a un animal de compañía será considerado un delito, y no una infracción. Además, aquellas personas que sean condenadas por maltratar a los animales tendrán que hacer un curso de sensibilización. También establece que las personas que decidan tener animales de compañía en el futuro tendrán que tener un «certificado de compromiso y de conocimiento», para asumir el cuidado que corresponde.
La medida de prohibición de perros y gatos en tiendas de animales entrará en vigencia a partir del 1 de Enero de 2024. De acuerdo a la misma, estas mascotas no podrán estar exhibidas en escaparates y se regulará la venta en línea. Respecto a los delfinarios, se establece que no podrán contar con cetáceos en el plazo de unos cinco años, y también se prohíben las granjas de visones con la finalidad de obtener sus pieles.
