Un viaje en el tiempo, una peli de los 80’, una playa, un lugar más que curioso en los alrededores de Nueva York, en otras palabras, Coney Island: la playa cerca de Nueva York que enamora a todo aquel que busca ver algo diferente de la Gran Manzana. Un parque de diversiones frente a la playa, un paseo marítimo ambientado otro siglo, ¿Qué es Coney Island? En este post te contaremos todo acerca de cómo visitar Coney Island, cómo llegar y qué lugares imperdibles de visitar en este barrio vintage cercano a Nueva York.
Qué es Coney Island
Muchos son los supuestos (y dependiendo la edad de los viajeros, aún más) que llevan a pensar en Coney Island. La isla (hoy península) corresponde al barrio de Brooklyn, en las afueras de Nueva York, un sitio sumamente frecuentado por los neoyorquinos durante los sofocantes días de calor del verano, buscando descansar en la playa y refrescarse en el Océano Atlántico.
Un paseo marítimo con aroma a palomitas de maíz y algodón de azúcar, una especie de circo, puestos de comidas, juegos de feria, una montaña rusa, ¿Qué es Coney Island?
La realidad es que Coney Island es todo eso y mucho más, es una de las ciudades más extravagantes, contrastantes y curiosos de los alrededores de Nueva York que bastante se aleja de una playa paradisíaca del Caribe pero que mucho se asemeja a uno de esos lugares que uno le busca, pero no encuentra explicación.
En muy resumidas palabras, hasta principios del siglo XX, Coney Island supo ser el balneario elegido por las clases más altas de la ciudad, rodeado de hoteles de lujo sumando, con el correr de los años, la llegada de casinos y parques de diversiones. Finalizada la Segunda Guerra Mundial, Coney Island se vio afectado, además, por las crisis económicas y futuros debacles perdiendo su luz, pero siempre buscando mantenerse en los pensamientos de los viajeros que visiten la ciudad y busquen conocer un lugar diferente, “quedándose en el tiempo” y buscando formarse como “ese lugar vintage cerca de Nueva York”.
Hay rumores que dicen que en el año 1917, incluso el mismísimo Al Capone formó parte de la historia de Coney Island.
Visitar Coney Island: una “escapatoria” de la urbanización
Pasados sus años de decadencia, hoy Coney Island supone un sitio frecuentado por neoyorkinos y extranjeros, un sitio donde “escapar” del calor sofocante pero que, al mismo tiempo, se conforma como uno de los mejores planes que hacer en Nueva York en verano, especialmente por ubicarse frente a la fresca brisa del mar, a solo 50 minutos de viaje desde la Gran Manzana.
Coney Island, el pequeño pueblito de los años 80’, con juegos y entretenimiento, sobreviviente de los años 20’, con sus puestos de comidas famosos a nivel mundial y sus atracciones extravagantes, se convierte en una ciudad cerca de Nueva York que hay que ver en un día, especialmente durante la temporada alta, donde sus parques de diversiones están abiertos todos los días, las personas comiendo en las mesas frente al mar y el ambiente se fusiona con el agradable clima.
- Consejo viajero: ¿Coney Island cierra en invierno? Absolutamente no, el Luna Park, el parque de diversiones del barrio, abre solamente durante los fines de semana en la época invernal, hay menos viajeros, pero Coney Island se mantiene en pie, aguardando por las temperaturas más altas. Por lo que, si se quiere visitar Coney Island en invierno, también es una posibilidad.
¿Por qué visitar Coney Island?
Un lugar curioso, extravagante, bizarro, diferente, ideal para visitar en verano, un gran plan distinto, Coney Island reúne todo lo que a los viajeros más viajeros les interesa. Visitar Coney Island es viajar al pasado, es buscar desde máquinas expendedoras de bolitas de azúcar, hasta grafitis y arte urbano, es encontrar los hot dogs más famosos de Estados Unidos y museos con salones de espejos o vestigios del inocente circo antiguo de los años 20’, es subir a una montaña rusa de mediados del siglo XX y visitar un barrio ruso en las afueras de Nueva York. ¿Quién se perdería algo así?
Visitar Coney Island es despegarse un poco de los rascacielos, del tránsito intenso, de las magníficas tiendas de la 5ta avenida y de los musicales de Broadway para entrar en el sector más peculiar de la Gran Manzana.
Visitar Coney Island es, además, adentrarse en un mundo completamente distinto, donde los prejuicios o lo que “usualmente se ve en una playa” debe quedar de lado, porque ni palmeras, ni cocos, ni resorts son los que se van a ver en su orilla, sino un curioso sitio que supo ser increíble, con el esfuerzo por mantener el cierto encanto que queda en sus esquinas.
Cómo llegar a Coney Island
Como te contábamos en un principio, Coney Island se encuentra en Brooklyn, a menos de 50 minutos en metro desde Manhattan, por lo que llegar a este llamativo lugar, no es tarea difícil.
El metro más conveniente es el que llega a Coney Island – Stillwell Ave, de las líneas D, F, N y Q ubicado a solo 5 minutos del mar. Claro que también es posible llegar en taxi o en bus, aunque vamos, estamos en Nueva York, todo lo que deba andar por la calle, no es la mejor recomendación.
7 cosas imperdibles que hacer en Coney Island
1. Luna Park
Quien ha visto alguna foto de Coney Island, lo primero que puede verse es su parque de diversiones frente al mar. Siendo este uno de los mejores planes que hacer en Nueva York en primavera, no es necesario que la playa sea una obligación, sino que se mantiene como telón de fondo de este curioso escenario.
El Luna Park es, en realidad, uno de los tantos parques de diversiones que conforman el muelle de Coney Island pero definitivamente es uno de los más representativos, especialmente por la antigüedad de sus juegos aún en funcionamiento (viajeros miedosos, no hay problemas, está todo chequeado).
Atracciones más importantes (y más emblemáticas) del Luna Park:
- Wonder Wheel: la gigantesca noria que se ve en todas las fotos de Coney Island fue inaugurada en el año 1920 y al día de hoy sigue en funcionamiento con góndolas que se deslizan de un lado al otro.
- The Cyclone: una montaña rusa de madera construida en el año 1927, en pie desde ese entonces, sobreviviendo a crisis y desastres naturales.
- Thunderbolt: una caída de 90 grados, giros por allí y por allá, la tercer y más emblemática atracción de Coney Island es definitivamente un gran lugar al que acudir en un paseo por este magnífico sitio.
2. Caminar por el paseo marítimo
Siendo ésta una de las playas cerca de Nueva York que definitivamente valen la pena visitar, un recorrido por Coney Island no estaría completo sin una caminata por el Boardwalk o el paseo marítimo de madera que se extiende bordeando el Océano Atlántico.
Junto con el Luna Park, esta es la postal clásica de Coney Island: donde se ven los puestos de comidas, los juegos y las terrazas donde sentarse a descansar tomando una cerveza fría, no sin antes degustar del clásico más tradicional de todo Coney Island: Nathan’s Hot Dogs. ¿Qué es? Merece un párrafo aparte.
- Consejo viajero: una gran recomendación que sirve tanto para recorrer el paseo marítimo como todo Coney Island (y una de las mejores cosas que hacer en Nueva york en primavera) es rentar una bicicleta en Dumbo (o en otra zona de Brooklyn) y pedalear por el encanto de la región.
3. Degustar un hot dog en Nathan’s
Antes te contábamos que Coney Island es conocido por una comida en particular: Nathan’s Hot Dog (panchos, perros calientes, hot dogs), un plato más que tradicional por la zona y un emblema de la región.
Hace más de 100 años que Nathan’s tiene su sucursal en Coney Island, específicamente en la esquina de Surf y Stillwell y, sin dejar pasar un día, ofrece a sus visitantes los hot dogs más famosos de todo Nueva York que hoy se han distribuido a lo largo de todo el país.
- Consejo viajero: es posible degustarlos con una típica cerveza Coney Island Ale, un clásico.
¿Sabías que todos los 4 de Julio (el día de la independencia de Estados Unidos) Nathan’s organiza un concurso de comer hot dogs a máxima velocidad? El récord para hombres es de 62 hot dogs en 10 minutos y, para mujeres, 40 en 10 minutos. ¿Lo has visto? ¡Es porque transmiten el evento por ESPN!
4. Entrar al museo de Coney Island
Un gran sitio donde conocer verdaderamente la historia de este magnífico lugar es el Museo de Coney Island que, conserva letreros, objetos y juegos mecánicos del antiguo barrio de Brooklyn. Dentro del museo, hay hasta un salón de los espejos, un sitio súper especial dentro del entretenimiento de la época.
- Consejo viajero: no adorado por muchos, pero sí un gran representante de lo que era considerado “circo” en los años 20’ y fomentando el concepto de “viaje en el tiempo” de Coney Island, a pocos metros del museo se encuentran los shows de fenómenos, no porque sea algo que apoyemos, sino que estar, está y difícilmente pase desapercibido. En el freak show puede verse una mujer barbuda, bebés con dos cabezas y personas con más de dos piernas. Solo está abierto los días de verano, Semana Santa y Halloween.
5. Fotografiar los grafitis de Coney Art Walls
Juegos de feria del siglo XX y grafitis… ¿Combinan? ¿Cuál hay? Es Coney Island y todo lo contrastante, es extravagante y fusiona perfectamente con el ambiente. Los grafitis de Coney Island son una de las cosas que hacer gratis en Nueva York, ya que es posible pasear entre los murales de arte urbano y, por qué no, relajarse tomando algo refrescante en las mesas dispuestas entre sí.
6. Descansar en la playa
Como te contábamos en un principio, una de las mejores cosas que hacer en Nueva York en verano, es visitar Coney Island y darse un baño refrescante en el Océano Atlántico. Puede no ser una de las magníficas y paradisíacas playas del Caribe pero es una de las playas cerca de Nueva York que, a pocos minutos, ya se siente la fresca brisa marina que tanto se necesita en las extremas temperaturas del verano.
¿Sabías que la playa es también un gran plan que hacer en Nueva York en Enero? ¿Cómo? Todos los 1 de enero, en Coney Island, se celebra el “chapuzón del 1 de enero”, una tradición donde todo aquel que quiera, puede ir junto al Polar Beach Club a darse un baño en las congeladas aguas del océano.
7. Pasear por Brigthon Beach
Al final del boardwalk, y siendo el barrio vecino de Coney Island, nos encontramos con Brighton Beach, Little Russia, llamado por algunos, por ser la colonia rusa más grande de Estados Unidos.
Al igual que Coney Island, Brighton Beach (y tal como dice su nombre) cuenta con una playa donde pasar los calurosos días de verano aunque se le suma la curiosa idea de caminar entre tiendas que estén escritas en ruso o en ucraniano, restaurantes de comidas típicas y tradiciones de la Unión Soviética que difícilmente puedan erradicarse (ni que tampoco se quiera, claro).
- Consejo viajero: pocos son los turistas extranjeros que llegan hasta Brighton Beach, por lo que si se busca más privacidad o lejanía de las aglomeraciones turísticas, es una gran idea.
¿Cuándo ir a Coney Island?
Visto todo lo que se puede hacer en esta curiosísima zona de Brooklyn, las ansias por ir seguramente son más que intensas. La realidad es que Coney Island está abierto al público durante todo el año, sobre todo los fines de semana.
Si se va a visitar Coney Island en junio, es el momento donde se celebra el Mermaid Parade, el desfile de las sirenas, un espectáculo donde todo el mundo está invitado a disfrazarse de los seres mitológicos y pasear por las calles de la zona, momento por el cual se festeja la llegada del verano.
Sin embargo, la mejor época para visitar Coney Island es cuando comienza el buen clima, los días soleados y las altas temperaturas de la ciudad, es decir, entre abril y octubre. Durante dichos meses, el Luna Park abre durante casi todos los días y el ambiente se combina con la alegría del clima.
- Consejo viajero: siempre es recomendable chequear los horarios en la página oficial del Luna Park.
Nueva York con niños: Coney Island
Un sitio fuera de sí es una gran alternativa que hacer con niños en Nueva York, una gran oportunidad para ver algo distinto de la mega ciudad y un espectacular sitio donde divertirse desde otra perspectiva. En Coney Island hay juegos para chicos y para adultos y cada uno de ellos presenta sus restricciones a la entrada, ya sea con respecto a la edad o la altura de los más pequeños.
Como para que a la ciudad no le falten más contrastes, llega Coney Island, con su extravagancia indiscutida para formar parte de las mejores cosas que hacer en Nueva York.
