Ni la magnífica e iluminada Nueva York ni la sabrosa e histórica Roma. Tampoco la romántica y exhuberante París. Contrariamente a lo que muchos hubiéramos imaginado, y quizás gracias al COVID-19, las Islas Chatham de Nueva Zelanda van camino a convertirse en uno de esos destinos que todos querremos conocer en algún momento. Y el por qué podría explicarse precisamente por una sola razón: menos es más.
Las Islas Chatham comprenden un archipiélago ubicado en un sector remoto del océano Pacífico, técnicamente dentro del territorio de Nueva Zelanda, pero casi en el límite. Son 10 islas ubicadas en un radio de 40 kilómetros, a unos 800 kilómetros al este de Christchurch, ciudad de este país de Oceanía.
Resulta que este destino, a la inversa de lo que ha ocurrido con la industria del turismo tras el impacto de la pandemia y las repercusiones negativas que esto ha ocasionado en hoteles, restaurantes, compañías aéreas y otras empresas prestadoras de servicios turísticos, está gozando de un particular aluvión de turistas. Y la decisión de visitar este tipo de lugares se enmarca en un contexto de tendencia hacia la búsqueda de sitios naturales y remotos, alejados de cualquier tipo de riesgo para la salud y el bienestar.
Las Islas Chatham evocan visiones de una tierra salvaje y remota unida al océano. Su fama radica principalmente en su abundancia de mariscos y pescados frescos y su fascinante vida marina y silvestre.
100% Pure New Zealand
Según se explica a través del sitio web del pueblo, las Islas Chatham se describen cómo “una parte especial del mundo, una parte única del patrimonio, el entorno natural, las plantas y los animales de Nueva Zelanda”, con lo cual no es casual que, tras el caótico 2020 que hemos vivido, muchos viajeros quieran instalarse allí para «olvidarse de todo».
En cuanto a los atributos que destacan a este particular destino, es importante resaltar que sus islas son de origen volcánico. Con diversos paisajes y una historia fascinante, las islas Chatham se han vuelto famosas por su abundante industria pesquera y los esfuerzos de conservación que protegen a muchas especies raras y en peligro de extinción.
¿Cuáles son los factores que vuelven atractivo a un destino como las Islas Chatham de Nueva Zelanda?
En un momento inédito en el que viajeros de todo el mundo se inclinarán por lugares para vacacionar en los que puedan descubrir la naturaleza y respirar al menos un poco de libertad, sin dudas estas islas cuentan con algunas particularidades que la convierten en un destino tan buscado por aquellos que desean desconectarse de todo y de todos. Y lo mejor: aquí no hay tal preocupación sobre el SARS-CoV-2.
A continuación, te contamos cuáles son algunos de los aspectos que harán que las Islas Chatham se incluyan pronto en tu lista de lugares a visitar:
-No necesitás pasaporte
–No hay redes de telefonía móvil en la isla, los teléfonos solo pueden usarse para fotografías. Seguro saber esto te hace sentir frente a un abismo pero vamos, que un par de días en un estado de desconexión no le vienen mal a nadie.
-Es considerado un lugar ideal para pasear por una de las muchas playas: desde una caminata corta hasta la caminata de 4 horas a lo largo de las arenas blancas de la bahía de Waitangi o la caminata de 1 hora y media desde Waitangi hasta Te One.
-Ofrece a los visitantes la posibilidad de recorrer las hermosas reservas Ocean Mail Scenic Reserve, Henga Scenic Reserve, JM Barker (Hapupu) Scenic Reserve y Nikau Bush Walk.
-Como si fuera poco, también se puede visitar la isla Pitt en un día, distinguida por ser la primera isla de Nueva Zelanda en ver el sol. Las atracciones de este lugar incluyen Mount Hakepa (o “Walk ‘em up” como se conoce localmente), Flowerpot Bay y la cárcel junto al acantilado, Waihere Head, Glory Cottage y Ellen Elizabeth Preece Conservation Covenant.
Si esos puntos lograron despertar curiosidad, esto es lo que también debes tener en cuenta para planificar una visita a las Islas Chatham:
-La electricidad es estándar para Nueva Zelanda en 240 voltios de corriente alterna. No siempre resulta muy confiable, por lo que los locales recomiendan protección contra sobretensiones en los dispositivos.
– A la hora de empacar, asegúrate de contar con ropa para condiciones climáticas variables puede ser una buena idea. Es preferible pensar en términos de capas de ropa y protección del sol, el viento y la lluvia y se recomiendan zapatos resistentes para caminar
-Hay una diferencia horaria de 45 minutos en las islas Chatham, por delante de la hora de Nueva Zelanda continental.
-No hay taxis. El transporte desde la aerolínea debe coordinarse con su alojamiento, al igual que cualquier vehículo de alquiler antes de su visita.
-Recomiendan consultar con el proveedor de alojamiento sobre cualquier necesidad especializada o alergia, ya que las Islas Chatham a menudo tienen suministros médicos limitados para requisitos específicos y urgencias médicas.
-Hay un pequeño hospital con un médico residente y enfermeras disponibles, Air Chathams siempre recomienda un seguro de viaje para cualquier viaje aéreo.
-Con profundas conexiones familiares y herencia local, muchos lugares de interés se encuentran en terrenos privados y requieren el permiso del propietario para visitarlos. Si no estás seguro, antes de ingresar a cualquier sitio es mejor preguntar primero.